La acupuntura urbana es una teoría ecologista urbana en la cual se combina el
diseño urbano con la acupuntura, una teoría medicinal china. Esta estrategia
analiza las ciudades como organismos vivos, con la capacidad de respirar, y
resalta las zonas que necesitan reparar. ‘Proyectos Sostenibles’ sirve entonces
como aguja para revitalizar las zonas dañadas y así, curando la ciudad.
Percibiendo la ciudad como un ser vivo, profundamente entrelazado, la
acupuntura urbana promueve la maquinaria comunitaria y establece núcleos
localizables – asimilándose al sistema meridiano del cuerpo humano. Usando la
tecnología satelital, las redes y otras teorías de inteligencia colectiva, se
selecciona y se trata quirúrgicamente los nodos con mayor potencial de
regeneración y mejora.
Esta escuela de ideales es atribuida al arquitecto y teórico finlandés, Marco
Casagrande. La escuela evita proyectos de renovación urbana a gran escala para
favorecer un abordaje más comunitario y local. En esta etapa de crisis económica
que corre, donde los presupuestos estan restringidos y hay recursos muy
limitados (sujeto? La teoría?) pueden ofrecer un solución democrática y barata a
las poblaciones que lo necesitan. Casagrande percibe cada ciudad como una
serie de organismos de energía compleja en la cual diferentes capas
superimpuestas de flujos de energía determinan las acciones de los ciudadanos y
a la vez el desarrollo de la ciudad. Combinando ecologismo y diseño urbano.
Casagrande crea métodos de manipulación puntual de los flujos de energía,
consiguiendo asi un desarrollo urbano ecológico y sostenible hacia las llamadas
ciudades de tercera generación’ (Ciudades Post-Industriales).La teoría se
desarrolló en la Universidad de Tamkang en Taiwan, en un estudio
independiente de investigación multidisciplinaria, Ruin Academy.
Concentrándose en las normas de la ecología y el diseño urbano, Casagrande
define la acupuntura urbana como una herramienta de diseño que contribuye a
la manipulación puntual, dando lugar a un desarrollo urbano sostenible. Algunos
ejemplos son los jardines públicos y granjas urbanas de Taipei.
Casagrande describe la acupuntura urbana como:
la manipulación entrecruzada de la arquitectura del intelecto colectivo y
sensorial de una ciudad. Una ciudad es percibida como un organismo energético,
sensible y multi dimensional; un ámbito viviente. El objetivo de la acupuntura
urbana es palpar la naturaleza y la sensibilidad para comprender el flujo de
energía de la recopilación de chi que se encuentra bajo la parte visible de la
ciudad y reaccionar con las zonas peligrosas de este chi.Y una mala hierba hará
raíz en la grieta más pequeña del asfalto destruyendo tarde o temprano la
ciudad. La acupuntura urbana es la mala hierba y el punto de acupuntura es la
grieta. El impacto de esta acción puede ser total, conectando la naturaleza
humana como parte de la naturaleza misma.
La teoría de acupuntura urbana abre la puerta a una creatividad libre e
incontrolable. Cada ciudadano tiene la posibilidad de participar en el proceso
creativo de planificación. Tiene también el derecho de usar un espacio en la
ciudad, sea cual sea su propósito, y desarollarlo a su gusto. Esta ‘nueva’ ciudad
post-industrial de Casagrande duplica la ciudad de tercera generación,
caracterizada por los ciudadanos prudentes que entienden y se ajustan a una
cooperación sostenible con el resto de la naturaleza, ciudadanos prudentes que
sienten la llamada de la sostenibilidad cooperativa del resto de la naturaleza,
ciudadanos que conocen los efectos de destrucción masiva de la maquinaria
moderna hacia la naturaleza. En un contexto mayor, la situación donde ocurra la
acupuntura urbana se puede entender como un signo revitalizante en una
ciudad que la desea sucumbir y que a la vez sepa comunicarle esto a la ciudad
de afuera.
La Acupuntura Urbana comparte similitudes con el concepto de urbanismo
nuevo; el urbanismo táctico. La idea se centra en una serie de recursos de origen
local en vez de en los programas capitalistas intensos, resultando en el fomento
de ciudadanos con más interés, más ideas relevantes y más prudencia con las
intervenciones. Estos pequeños cambios, según afirman los defensores,
estimularán la moral comunitaria y catalizarán la revitalización. Podemos resumir
esta idea en una simple declaración: la acupuntura urbana siginifica centrarse en
las pequeñas, sutiles y ascendientes intervenciones que aprovecharán y dirigirán
la energía comunitaria de manera positiva para curar el desecho urbano y
mejorar su paisaje. Es una alternativa a las grandes, verticalistas y megaintervenciones
que típicamente requieren inversiones importantes de fondos
municipales y la navegación burocrática de balduque. Las intervenciones de
micro-escala de la acupuntura urbana les interesa a los ciudadanos activistas y a
las comunidades económicamente dañadas.
En Méjico la acupuntura urbana se refiere a un concepto que convierte viviendas
temporales, como cobertizos en tugurios, en hogares simples que permitan
añadir espacio en un futuro dependiendo de la necesidad y el coste. Esta
estrategia transforma los tugurios sin necesidad de transladar familias que hayan
estado viviendo juntos durante generaciones. En Sudáfrica, la acupuntura urbana
se percibe como una oportunidad para proporcionar un medio a personas para
que desarollen su creatividad y todas las ventajas que esto conlleva como por
ejemplo la inovación y la creación de empresas que se concentrarán y tratarán
partes de la ciudad. Estas partes serán comunidades que pueden proporcionar
oportunidades a esas zonas que no tienen la infrastrucutura establecida en otras
ciudades normales. Este enfoque abastece un método más realista y menos
costoso a los planificadores de ciudades, y a los ciudadanos para poder
engendrar pequeñas mejoras efectivas en las comunidades que resulten en el
bien de la ciudades.
Yo creo que alguna de esta ‘magia’ medicinal podría y debería ser aplicada a
todas las ciudades, ya que muchas están enfermas y otras están en estado
terminal. Como la medicina que se necesita en una interacción entre médico y
paciente, en la planificación urbana también es necesario hacer que la ciudad
responda y reaccione a algún tipo de medicina; para tocar un área de tal manera
que sea capaz de curarse, mejorar y crear una serie de positivas reacciones en
cadena. Esto es indispensable para revitalizar las intervenciones que harán que el
organismo funcione de otra manera.